domingo, 6 de febrero de 2011

De calamidades

Hace unos dias recibí mail masivo de titulo; Cómo digerir calamidades...sí también quedé en silencio y dejé ir varias conexiones atendiendo solo los imprescindibles. Cada vez que abrí la casilla repasé el subject para verificar si exactamente era eso lo que decía.
Antes de pulsar el cursor y desplegar divagué sobre el supuesto contenido y pensé en situaciones desafortunadas nos rocen a mi y mis mas amados, fué así que se estrechó mi garganta en un gesto compulsivo hasta la tos, la salida leer de una vez y sorprenderme con el abordaje sobre diversos sucesos de descontrol climático que aturden hoy hasta el asombro por la magnitud y efectos materiales aparentemente sin solución para el clasico modo de atender estos fenómenos, conocido estilo catastrofista. Versus su propuesta de repasar desde la conciencia las leyes universales que regulan el proceso evolutivo en que todos participamos, la tierra se está equilibrando, ella magnífica y esencial en el tránsito humano requiere entonces urgente:podamos sintonizar con el precepto ancestral de reciprocidad para quien soporta generosa y delicada la vida que somos. Amor y Gratitud a tu tierra.
Hay en este mensaje la extravagante idea de creer en la capacidad de autogeneración del planeta como una entidad dinámica,inteligente, perfecta,auto conciente, una nota imprescindible en el concierto universal, nada allí puede resonar con calamidad, incluidos nosotros huéspedes, todo va estar bien.
Digerir sí el cambio, hacer parte del cambio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario